Juncos poema de Andrés Díaz Marrero


Juncos
Andrés Díaz Marrero




Son las espigas del junco
dedos que apuntan al cielo
y desde el húmedo suelo
señalan a lo profundo.
Pueblo noble que recibes
tu nombre de augusta planta
el Gurabo que te baña
canta a tu gracia y origen.
Verdes juncos florecidos,
primor de quietud y gozo,
patente signo amoroso
de este pueblo bendecido.









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