El fantasma de la casa
Vivir
en la casa de Ángel fue una solución a un problema viejo en mi vida. La casa de
Ángel tiene un solo cuarto dormitorio, cocina, sala y comedor juntos. Además de
un pequeño baño. Es una casa pequeña que se hace grande para una persona sola.
Tiene un pequeño problema de electricidad y una gotera incansable. En lo demás
circunstancia se encuentra bien. Me refiero a que se respira paz, a pesar que
es una casa construida para los años ochenta. La casa es de concreto. Tiene una
pequeña filtración cerca de la ventana que da al camino. La ventana no está cubierta con tela
metálica.
Cuando
llega las diez de la mañana se abre todas las ventanas para que la brisa del
camino entre y salga de la pequeña casa. Al pasar las cuatro de la tarde se
empieza a cerrar las ventanas para que los insectos nocturnos no vengan a
visitarme. De noche no falta el abanico que ventila aire por toda la
habitación.
Es verano. Las noches se vuelve
cálida y cortas. Los sonidos nocturnos son mas percibidle. El amanecer llega en
horas tempranas de la madrugada. Los
coquíes se oyen cerca de la ventana y con su melodía logro conseguir el sueño. Despierto
con deseo de ir al baño. Dudo un poco en levantarme, pero de todo modo venzo el
sueño y me levanto.
De camino
al dormitorio veo lo que parece ser una densa niebla que se mueve desde el
sillón de la sala a la silla de la esquina del juego de mesa en el comedor. Al
lado de la silla se encuentra un cofre grande donde Ángel guarda algunas cosas.
No le puse atención al fenómeno que presenciaron mis ojos. Acostándome a dormir.
La costumbre de levantarme al
baño en medio de la noche era normal. Lo anormal era ver lo que parecía una
densa niebla desplazarse por la casa. Lo cual pensé que podía ser un eidolon, espíritu,
ente o entidad. Para que me entendéis le llamaremos un
fantasma. No te voy a negar que me daba miedo.
Pero he escuchado muchas historias de fantasma, la cuales me ayudaron a
sobre llevar este susto. He creído en la existencia de fantasma, pero nunca
hasta ahora me había dado con uno. En verdad me siento incomoda. A saber, que
algo del mas allá comparte tu misma casa. Te siente observado, aunque nadie te
vea. Son sensaciones raras que invade tu mente y tu cuerpo. Preguntándote que asunto no resulto tendrá el
fantasma para no seguir su camino y quedarse viviendo en la casa.
Al contarle a mi amiga E… me
dijo que debía de ir a un siquiatra ya que podía ser una alucinación, o una
afección en el cerebro. Debí pensar ante e imaginarme su contestación ya que
ella no cree en fantasma. Hasta me llamo al siguiente día para sacar una cita
con un psicólogo.
El cofre grande que tenía
Ángel cerca de la silla del comedor está bastante viejo y en gran deterioro. Y
temía que fueran a dañarse los documento que allí guardaba. Al siguiente día me
trajo una cubeta de plástico con tapa para pasar los documentos que allí se
encontraba. Entre los documentos se
encontraba un cuadro cuyo dibujo era hecho de clavos e hilos. Me pareció lindo.
Y lo coloque en unas de las paredes del baño.
Ángel me conto que ese cuadro
se lo hizo su hijastro P…. El cual se
había privado de la vida con un disparo en la cabeza hace más de veinte
años. Me contó que P… era un joven
adulto que tenía problema con sustancias controladas. Cual parte de la familia negaba. Pero que solo el conocía las veces que logro
salir de los residenciales sin ningún arañazo.
La puerta
del dormitorio como la del baño siempre están abierta. Me había acostado a
dormir y había pasado la media noche cuando presiento que una sombra se dirige
al baño. Me arropo de pies a cabeza. ¡Oh Dios! Podía ser posible. Que el
fantasma fuera P….
Una noche
saqué valor y después de haber visto pasar el fantasma me senté en la tapa del
inodoro. Le dije al cuadro: -Yo no te conozco, pero te espero mañana en la
noche en el comedor para dialogal.
Podía ser
que la conversación con el fantasma no se lograra, pero nada impedía no
hacerlo. Él se comunicaría por el pensamiento. Al llegar la noche me encontraba
sentada en unas de las sillas del comedor, con un vaso de agua bien fría. Ya
que estaba sudando como caballo de hipódromo. Al llegar la noche saque un poco la silla que
estaba frente a mí. Pensé que estaba sentado en la silla. Presintiendo que
estaba aquí. Pedi protección a Dios para que comisionara a los Espíritus Buenos
para que me ayudara y a la misma vez que alejara a los Espíritus Malos o
Imperfectos. Empezando la conversación.
- ¿Esta aquí?
Si.
- ¿Cómo te llamas?
P…
- ¿Qué hace aquí?
Espero a Ángel.
- ¿Porque espera a Ángel?
Por ayuda.
-
¿Ayuda?
Tengo miedo y no sé qué hacer.
De momento me sentí sola en la mesa. Sabía que ya no
estaba. Me invadió la tristeza. No sabía cómo podía ayudar aquel fantasma que
tenía miedo. Le comenté a Ángel lo que había pasado. Pero al igual que yo se
puso triste. ¿Cómo se puede ayudar al espíritu de un suicidad?
Al pasar unos días me comunique con mi espíritu protector y
el me indico que podía ser para ayudar a P… De esa madera P… entenderá su
situación actual y llegará al arrepentimiento. Te diré lo que se hizo. No quiero que piense que es un ritual. Porque
no lo es. Solo comparto lo que hice.
Primero le indique a P… que nos reuniríamos por algunas
noches. Al llegar la noche separé una silla de la mesa y otra silla me senté. Pedi protección a Dios para que comisionara a
los Espíritus Buenos para que me ayudara y a la misma vez que alejara a los
Espíritus Malos o Imperfectos. Empecé a leer en voz alta, despacio y firmé los
ítems 944 al 955 del El Libros de los
Espíritus. La siguiente noche leí en voz alta del libro de Colección de Oraciones Espiritas la
oración para un suicida que también se encuentra libro El Evangelio Según El Espiritismo.
Ha pasado algunos meses y no he vuelto a ver a P… Y el
cuadro sigue colgado en el baño de la casa. Y mi amiga E… me acompañara la
siguiente semana al psicólogo.
Iris
de la Rosa Vélez
31 de
octubre 2016
Nota: Te recomiendo visitar: http://soyespirita.blogspot.com.co/2011/09/como-ayudar-al-espiritu-desencarnado-de.html
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