El crochet tunecino

El crochet tunecino

Es quizás una de las herramientas más desconocidas del tejido. Parce un palillo, que tiene punta de crochet y tiene un aspecto parecido al telar una vez terminado.

Pero el crochet tunecino ha estado presente a lo largo de su historia. El crochet tunecino fue uno de los puntos que apareció en las primeras publicaciones de tejidos de crochet en la década de 1800. La puntada se utilizaba principalmente para las mantas. Sin embargo, este punto de ganchillo apareció bajo diferentes nombres. El término “crochet tunecino” se atribuye a los franceses. El mismo punto también fue llamado puntada afgana de punto crochet, tejido escocés, ferrocarril y gancho de tejer. Los nombres más perdurables son crochet tunecino y punto afgano, con tejido de punto de ganchillo en el tercer puesto.

Internet ha ayudado al crochet tunecino a recuperar la visibilidad entre las trabajadoras con agujas. Las editoriales todavía utilizan diferentes nombres para este punto, pero la comunicación en línea hace que la investigación de estos nombres sea más accesible. Los tejedores interesados en la puntada afgana tienen más recursos para encontrar ayuda con términos y variaciones del punto. Esto también ayuda a la puntada a salirse de sus usos anteriores típicos como mantas y ropa holgada que experimentan y comparten los que tejen, sus innovaciones con las técnicas.

¿Cómo lo tejo?

El tejido siempre se trabaja del derecho, la labor nunca da la vuelta.
Luego de realizar la cadena inicial, comenzamos en la primer pasada a levantar los puntos sobre la aguja hasta llegar al final. Una vez hecho esto, retornamos sin girar la labor, cerrando cada uno de estos puntos. Al igual que en el crochet, existen los puntos base y variantes que forman los puntos fantasía.

La innovación de Knit Pro

 El tunecino suele ser un largo crochet donde se van levantando los puntos. Muchas veces esto genera que la mano tenga que hacer mucho esfuerzo para sostenerlo. Es por esto que Knit Pro le puso una extensión de cable a un crochet normal, lo que hace que el peso del tejido caiga y la mano sostenga el menos posible.