Bendición y maldición

 Bendición y maldición











557 ¿La bendición y la maldición pueden atraer el bien o el mal en aquellos sobre quiénes recaen?
«Dios no oye la maldición injusta, y el que la pronuncia es culpable ante él. Como tenemos dos genios opuestos, el bien y el mal, puede existir una influencia momentánea, hasta en la materia; pero solo se verifica siempre por la voluntad de Dios, y como añadido de prueba para aquel que es objeto de ella. Por lo demás, a quien se maldice con frecuencia es a los malvados y a quien se bendice es a los buenos. La bendición y la maldición no pueden nunca desviar a la Providencia del camino de la justicia; ni hiere al maldecido sino cuando es malvado y su protección solo cubre al que la merece.»
Allan Kardec





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Memoria de mi Espíritu Clara Román- Odio

  Memoria de mi Espíritu Clara Román- Odio En Memoria de mi Espíritu, un libro que no presenta la autora, su memoria de recuerdos de su ni...